Golpe de sol
Zaidee Rose Stavely (México, nacida en Estados Unidos, 1978)
Helado
Zang Kejia (China, 1905-2004)
Caballo viejo
Zbigniew Herbert (Polonia, 1924-1998)
El abismo del Señor Cogito, El de ciencias naturales, Substancia
Zbynek Hejda (República Checa, 1930-2013)
Ahora...
Zeynep Tuğçe Karadağ (Turquía, 1988)
El que va a emergencia solo
Zhanar Absadyk (Kazajistán, 1981)
Somos sombras los dos
Zhanat Askerbekkyzy (Kazajistán, 1966)
El destino de los ídolos de piedra
Zhang Heng (China, 76-139)
Cuatro baladas de cuita
Zhang Ruoxu (China, 660-720)
El río primaveral, en una noche de luna y flores
Zhao Luanluan (China, 1341-1367)
Nubes del peinado
Zhou Zuoren (China, 1885-1967)
El riachuelo, Los dos hombres que barren la nieve
Zhu Shuzhen (China, ca 1135–1180)
Avanzada la primavera...
Zhu Ziqing (China, 1898-1948)
El sentimiento es insuficiente
Zoé Valdés (Cuba, 1959)
Debilidad, Joya parisina sobre unos pechos recatados
Zong Baihua (China, 1897-1986)
Nosotros
Zubaydah Bashir (Túnez, 1938-2011)
¡Haz circular el vaso, copero...
Zuhayr ibn Abi Sulma (Arabia Saudí, 520-609)
Mu‘allaqa
Zhanat Askerbekkyzy (Kazajistán, 1966)
El destino de los ídolos de piedra
Zhang Heng (China, 76-139)
Cuatro baladas de cuita
Zhang Ruoxu (China, 660-720)
El río primaveral, en una noche de luna y flores
Zhao Luanluan (China, 1341-1367)
Nubes del peinado
Zhou Zuoren (China, 1885-1967)
El riachuelo, Los dos hombres que barren la nieve
Zhu Shuzhen (China, ca 1135–1180)
Avanzada la primavera...
Zhu Ziqing (China, 1898-1948)
El sentimiento es insuficiente
Zoé Valdés (Cuba, 1959)
Debilidad, Joya parisina sobre unos pechos recatados
Zong Baihua (China, 1897-1986)
Nosotros
Zubaydah Bashir (Túnez, 1938-2011)
¡Haz circular el vaso, copero...
Zuhayr ibn Abi Sulma (Arabia Saudí, 520-609)
Mu‘allaqa
Me alegra que empiece otra vez el poema del dia y que lo hagas con César Vallejo, ya veremos lo que me encuentro.
ResponderEliminarBesos
También es casualidad. El Poema del día comenzó con César Vallejo y cuando me puse a ver qué ficha tocaba al reanudar el ciclo resulta que también era César Vallejo.
ResponderEliminarVallejo entonces te espera a la vuelta de la esquina, ya no tenía cara los surcos del sufrimiento en la cara y en una mano llevaba un cáliz nuevo que envolvía la promesa del nuevo encuentro en el ciclo de los poemas que vienen y van. Atte Luis Manuel Cuevas Quintero
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