Volverán las oscuras golondrinas
I
Y caer
las oscuras aquellas, las tupidas
como lágrimas.
Y caer
las ardientes, aquellas de rodillas.
Sus nidos como lágrimas del día.
Sus nidos. Sí, sus nidos.
*
De tu jardín absorto y de rodillas,
las palabras que el vuelo refrenaban.
Pero aquellas oscuras madreselvas,
pero aquellas tupidas golondrinas,
pero aquellas cuajadas de rocío.
*
Volverán del amor a tus cristales
aquellas como lágrimas del día
en tu jardín ardientes a sonar,
y otra vez a la tarde las oscuras
sus flores abrirán.
Pero mudo y absorto de rocío,
como se adora el ala al contemplar
y caer.
Llamarán las oscuras, llamarán.
Y otra vez con el ala
en tu balcón los nidos.
De tu jardín las tapias.
Volverán, las tupidas, volverán.
Pero aquellas ardientes, pero aquéllas.
*
Las lágrimas ardientes a escalar,
las palabras cuajadas, las palabras.
Y caer, como nidos
de tu jardín absorto ante el altar.
Madreselvas, ardientes golondrinas,
aquellas madreselvas.
*
Tu corazón, aquéllas,
nidos, balcón, aquéllas,
aquellas golondrinas.
Pero mudo y absorto,
pero aquellas rodillas.
Rodillas, tapias, tapias.
*
Las oscuras, oscuras,
las tupidas, tupidas.
Pero mudo y absorto.
Golondrinas,
golondrinas.
De tu jardín las tapias a sonar.
*
Y caer, como lágrimas del día.
*
Pero aquellas ardientes de rocío
nidos
balcón,
jardín,
gotas,
tapias,
vuelo,
día.
*
Ala,
cristales,
corazón,
altar,
nombres,
sueño.
Llamarán, llamarán, llamarán.
*
Volverán,
volverán,
¿volverán?
No, no, no, no, no.
II
Mi dicha, corazón las golondrinas,
de tu jardín las tapias a escalar
y otra vez a la tarde, aún más hermosas
cuyas gotas mirábamos temblar,
pero aquellas cuajadas de rocío,
pero aquellas que el vuelo refrenaban
pero aquellas oscuras madreselvas...
*
Volverán del amor en tus rodillas
las gotas a caer,
pero aquellas que el vuelo, las ardientes...
En tus oídos. Mudo
y absorto, ¿volverán?
¿Volverán a escalar como se adora?
Nuestros nombres caer
como lágrimas, tapias, desengáñate;
así no.
*
Volverán del amor en tus oídos
y otra vez con el ala en sus cristales.
Volverán las tupidas madreselvas,
las palabras ardientes a sonar.
Pero mudo y absorto y de rodillas;
pero aquellas que el vuelo refrenaban.
Jugando llamarán,
sus flores abrirán,
tal vez despertará.
Como se adora a Dios no te querrán.
*
Tu corazón, sus flores,
de tu jardín, el ala.
Tupidas,
tupidas,
tupidas.
Oscuras,
oscuras,
oscuras.
En tu balcón, las gotas
ardientes a sonar.
*
Tu hermosura, aún más hermosas
del amor.
Con el ala cuyas gotas
desengáñate, y caer.
Refrenaban a colgar
de su profundo.
Tu hermosura, tu hermosura.
*
Absorto, golondrinas,
como se adora en tu...
Oscuras del amor,
en tu mudo jardín.
En tu mudo balcón
ardientes de rocío.
Oscuras, nuestros nombres,
a sonar, madreselvas.
Oscuras golondrinas,
ésas, aquéllas, cómo, corazón.
*
Golondrinas palabras,
ardientes madreselvas.
Las tapias a sonar en tu balcón,
las oscuras, oscuras, las oscuras.
Pero como
de rodillas, absorto (las rodillas)
y caer, como lágrimas del día,
desengáñate.
En tu balcón aquéllas, las tupidas,
pero ésas...
*
Llamarán,
volverán,
abrirán,
querrán.
Sus flores,
sus nidos.
Contemplar,
escalar,
temblar,
sonar.
*
Altar, temblar, sonar,
llamarán, volverán, abrirán.
Sus nidos volverán las madreselvas
de su profundo sueño al contemplar.
Y caer.
*
¿Volverán?
Tu corazón, de su profundo sueño
en tu balcón sus nidos a colgar.
¿Volverán?
*
Rocío en tu balcón, pero las tapias,
sus flores de rodillas, golondrinas,
ardientes a escalar.
¿Volverán las oscuras?
Las oscuras palabras de las gotas,
las madreselvas de rocío como
rodillas.
¿Volverán las oscuras madreselvas?
Del día
rocío en tu balcón
y caer,
¿volverán?
*
En las tapias oscuras a sonar
las ardientes tupidas.
De tu jardín las golondrinas como
palabras a escalar
no volverán.
Pero Dios, mudo.
Y caer.
No volverán oscuras ni tupidas.
No volverán ardientes ni palabras.
Juan Eduardo Cirlot, incluido en Las ínsulas extrañas. Antología de poesía en lengua española (1950-2000) (Galaxia Gutenberg Círculo de lectores, Barcelona, 2002, selecc. de Eduardo Milán, Andrés Sánchez Robayna, Blanca Varela y José Ángel Valente).
Otros poemas de Juan Eduardo Cirlot
Toca aquí para ir al Catálogo de poemas
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tomo la palabra: