Fotograma: hombre con sombrero de mimbre
entrena a su pájaro en una balsa de bambú.
Es la doctrina del aire. ¿Soñará con un bosque
una cúpula invertida en un espejo de pinos?
Tras el ataque el pescador recoge los peces
en un recipiente de paja. De otro modo
si desata el hilo de su garganta el ave
partirá lejos enfocada en el mapa de ruta
de las migraciones transcontinentales.
En condiciones seguras será como un arqueólogo.
Excavará el terreno, anidará en su propio islote
alejado del gráfico elemental de los ríos
pero en el fondo sabe, como lo saben
todos los pájaros acuáticos, que el método
es inalterable, lo mismo que sucede con
la ingeniería de las represas o el movimiento
de sable de un samurái. De repente
te extraño. ¿Serás el pescador en la corriente
sosteniéndose con una soga en la mano?
Pronto una nube negra, liviana como
una alfombra voladora, estará aquí
y recorrerá tu interior como un collar
un regalo que alguien echó de menos.
Marcelo Daniel Díaz en El fin del realismo (2014), incluido en Penúltimos 33 poetas de Argentina (UNAM, México, 2014, selec. de Ezequiel Zaidenwerg).
Otros poemas de Marcelo Daniel Díaz
La mañana, Satélites
Toca aquí para ir al Catálogo de poemas
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tomo la palabra: