Estás en paz, mujer, con todo el mundo,
por eso miras tan serenamente
desde dentro del alma hacia la calle,
estás sentada ya como un viajero,
esperando a tu tren que te regrese,
al Todo que te llama y te reclama
hablándole a tu piel y a tus cabellos.
Estás en el andén, te sobra el tiempo,
por eso te has sentado y saboreas
el poco que le falta a tu regreso.
Pedro Beltrán en Burro de noria (Ediciones Martínez Roca, Barcelona, 2002).
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Ojalá que es anciana del balcón no esté elaborando un chisme sobre la vecina porque ahí el poema tan bueno perdería sentimiento.
ResponderEliminarSaludos Francisco.
Jajajaja, sí, se perdería un poco el poema, jajaja, aunque también tendría su encanto, jajaja.
ResponderEliminarUn saludo.
Tengo una pagina en el blog. Mi pagina se llama "la casa de pan" me alegraria si los vieras y me dieras tu opinion.
ResponderEliminarRicardo.