Lirio de la meseta del Anáhuac: la frente
recia, como las blancas cumbres de los volcanes,
ardida con el fuego de los altos afanes
y alzado el pensamiento con ímpetu valiente.
Vocada para vuelos altivos de la mente
encadenó, no obstante, sus águilas audaces,
y cruzando interiores moradas con fugaces
plantas, por vida eterna dio vida contingente.
¡Ixtaccihualt humano! Paradojas extrañas
la hicieron el ejemplo de austeros ascetismos
- ¡nieve sobre las cimas y fuego en las entrañas! -
Y al señorear su mente todos los espejismos,
contempló firmemente las inmensas montañas
y se elevó a los cielos sobre cumbres y abismos.
La Habana, 12 de noviembre de 1951.
Mercedes García Tuduri, incluido en Cinco poetisas cubanas (1935-1969) (Ediciones Universal, Miami, 1970, ed. de Ángel Aparicio Laurencio).
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