grand hotel des bains, habitación 308.
ante la puerta de la habitación aguardo a Tadzio.
es puntual, totalmente fumado, con camisa de seda mojada por la ducha
al quererse echar agua en el pelo.
—scusa, una apología del tiempo de los cabellos lacios, dijo él.
esta no sería la habitación en la que habría dormido con Dirk Bogarde.
habría sido en el «Excelsior».
—por lo demás, no fue Dirk Bogarde, sino el taxista de su maquillador, era más interesante, como la gente que hace de todo—
él se habría entendido con el bello vespuccio, que se ha enfadado conmigo, porque lo he llamado vespuccio, cuando su nombre es vespucho.
tampoco giacomo, el botones, tendría por qué consentirme llamarlo «reina de inglaterra».
—he preguntado por el hotel en el que estuvo goethe, digo, y tras una pausa, intimidado:
—pero, ¿tú te llamas tadzio o no?
—por supuesto que no, responde enronquecido.
Gino Hahnemann en Alegoría contra la inconsiderada mayoría (1991), incluido en Amores iguales. Antología de la poesía gay y lésbica. Panorama general (La Esfera de los libros, Madrid, 2002, selec. de Luis Antonio de Villena, trad. de David Pujante).
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