(las avispas) machacan un corazón de pollo,
frito, seco y con mordidas, pedacito de corazón (que los gatos
dejaron en el suelo –
Cómo me maltrata el lenguaje
al describir/nombrar, cómo se me impone su medida)
La ajada migaja se deshace, las avispas –
(o quizá sean moscas que parecen avispas, ¡me toca vengarme!)
zurean sobre la exhausta mesa de madera.
Al brillo del sol luce exhausta.
El despertar confianza, lo que alguna vez fue su orgullo, pino,
apenas hay rastro de tal presencia.
Mas cómo entonces, al constante fluir de hojarasca y de viento,
la miga de corazón se deshace, ya casi polvo,
y abajo en mi corazón se machaca un agudo
horror diminuto, asco acaso.
El tono de las máquinas se mantuvo impasible, taladraban…
Elke Erb en Spitzen. Gedichte. Fanbook. Hall of Fame (2018), incluido en Periódico de poesía (23 de noviembre de 2020, UNAM, México, versiones de Daniel Bencomo).
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