¿Y quien describiría la velocidad de tu carrera?
Elevándonos a través del aire para encontrar la radiante morada,
El empíreo palacio del tronante Dios,
Sobre tus alas aventajamos al viento,
Y dejamos atrás el rodante universo.
De estrella a estrella el ojo mental vaga,
Mide los cielos y recorre las regiones superiores;
Allí en un panorama abarcamos el magnífico todo,
O con nuevos rumbos asombramos el alma infinita.
Phillis Wheatley en Poems on Various Subjects, Religious and Moral (1773), incluido en Poesía negra (Biblioteca virtual, Internet, s. a., versión de Marcos Fingerit).
Gracias por compartirla. Phillis Wheatley fue esclava pero sus amos profundamente religiosos la trataron bien y le dieron oportunidad de estudiar. Al ser negra y mujer no creyeron que ella había escrito sus poemas paso un riguroso examen a manos de los intelectuales de su época y "comprobaron" que realmente ella había escrito sus poemas.
ResponderEliminarUn abrazo,
María
Eso es.
EliminarMagnífica aportación, gracias. Un abrazo.
EliminarGran imaginación encerrada en una pluma...
ResponderEliminarPues si.
EliminarHola... ¿Dónde puedo conseguir más poesías de esta autora? Gracias.
ResponderEliminares un poema para leer, leer, y volver a leer para que en algún momento descubramos el dia
ResponderEliminarY cada día nos dirá una cosa diferente.
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