El río tuvo entonces
las aguas meditadas y profundas,
los buques de silencio, los pájaros grises
que hubiera visto alguien por nosotros.
Sólo un puente vacío
nos dio a leer el curso de la noche
y los signos de sombra
de habernos alejado.
Sólo si se está lejos es posible
amar una distancia,
y convertir la niebla
en un pasaje triste,
y adivinarse aislado,
o en la vida de otros.
Luis Muñoz en Septiembre (1991), incluido en Pasar la página (nº 4 y 5 de la revista Diálogo de la lengua Ediciones Olcades, Cuenca, 2000).
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Homosexualidad. Primera versión
"Aguas meditadas" "puentes vacíos" Elementos como borrados por el recuerdo. Un poema para un día melancólico. Muy bonito.
ResponderEliminarPaso nuevamente por aquí y "me adivino aislado" y "en la vida de los otros", esa distancia que nos atormenta.... Saludos
ResponderEliminarPues sí, al menos aquí en Leganés hace un día melancólico. Un bello poema, sin duda.
ResponderEliminarAmigo Cenamor:
ResponderEliminarUn poema que se deja leer. Respecto al estado del tiempo coincidimos: aquí en mi "Náralit" va tristona la mañana, o nos ponemos tristes cuando hay nublados en el día y el viento sopla con un poco de frío.
Abrazos fraternos en Amistad y Poesía verdaderas,
Frank.
Hace muchos años que leí este poema y lo recuperé hace unos días.
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