Ahora es oportuno hacerse a un lado.
De lejos observar el sol tan sucio
la lenta procesión de los que huyen
el sórdido plañir de la caída.
Dejar hacer al cuervo su trabajo.
Luis Luna en Cuaderno del guardabosque (Ediciones Amargord, Madrid, 2007).
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¿Se puede cazar en febrero?
ResponderEliminarMi padre cazaba y en ocasiones me llevava con él, yo contento de acompañarle, no me trasmitió su afición, pero alguno de esos días sentí lo del sol sucio, y los carroñeros son los que limpian el campo, eso lo saben todos los cazadores.
A mó no me mires, yo solamente azaba ratas de alcantarilla.
ResponderEliminarMe encanta este poeta.
ResponderEliminarRaquel
Está muy bien, sí, ¿Lo conocías?
ResponderEliminarSí, además lo descubrí gracias a tu blog
ResponderEliminarAh, jajaja, pues mira, para algo sirvió este blog. Tú tienes blog?
ResponderEliminar¡Qué curioso! También me encanta este poeta.
ResponderEliminardesprende mucho Amor.
Un abrazo.
No, no tengo, prefiero leer los blogs de los demás que tener uno :-)). Menudo trabajazo tiene que ser.
ResponderEliminarRaquel
Si quieres un blog como el mío, sí, jajaja, tiene mucho trabajo. Pero se puede llevar también de forma más relajada.
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