Olvidando, sí, me olvidaré de todo.
Uno después de otro. Los caminos que he cruzado.
Los caminos que no crucé. Todo lo que ocurrió.
Y todo lo que no ocurrió.
No voy a seguir transportando,
ni arrastrando el pasado silencioso, o ese "yo"
que era más hermoso y más grande
de lo que jamás podría haber sido.
Me sacudiré los pasos
que engrosan mente y visión,
y dejaré que mi corazón vea el sol mientras se muere.
Que la luz de una nueva mañana abra mis ojos cerrados.
Muerte, ¿Eres tú la que está acá? Buen Día.
¿O debería decir Buena Oscuridad?
Vahan Tekeyan, incluido en Herederos del kaos (11 de mayo de 2015, Barcelona).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tomo la palabra: