En la ladera, más alta que el mar, más alta que los cipreses, se han dormido.
El cielo de hierro les ha vaciado los recuerdos, las palomas han volado
hacia una dirección que han indicado sus dedos en el levante de sus restos.
¿No tenían derecho a rociar con el arrayán de sus nombres el reflejo de la luna en el agua
y a plantar un naranjo en las trincheras para que disminuyera la oscuridad?
Duermen más allá del horizonte, en una ladera en la que se han petrificado las palabras,
duermen en una piedra cincelada con los huesos de su Fénix...
Nosotros tenemos el corazón necesario para llegar pronto a la fiesta de sus cosas.
Tenemos el corazón necesario para arrebatar el espacio que permita regresar a las palomas
al comienzo de la tierra. ¡Oh, los que dormís en los confines de la tierra en nosotros! La paz sea
con vosotros... la paz.
Mahmud Darwish en Menos rosas (1986) (Ediciones Hiperión, Madrid, 2001, trad. de María Luisa Prieto).
Otros poemas de Mahmud Darwish
Toca aquí para ir al Catálogo de poemas
Es necesario leerlo.
ResponderEliminarMahmud Darwish, uno de los más grandes poetas de la segunda mitad del s.XX.
El volumen de Hiperion nos acerca, pero el lector puede encontrar maravillosos poemas en la red. Y si no se sabe árabe, en castellano, francés, inglés. italiano etc...
Pero hay que leerlo. Indispensable.
Aunque la vida continúe.
Uno de los grandes líricos comprometidos. Y aviso para caminantes: En vida se mojó hasta mancharse.
Personne ne va plus?
Pere Bessó