Dejamos los objetos ordenados cada noche. Sobre
las mantas agujereadas de pelo refractario.
De día volvemos a colocar ladrillos transparentes. De nuevo construimos la pared traslúcida.
La pared es también una malla. Una red de innumerables nudos. Se alza por encima de nosotros. Y también es el suelo y el horizonte.
Exhaustos recorremos con los ojos su inexplicable geometría.
Pilar Fraile Amador en La pecera subterránea (Amargord Ediciones, Madrid, 2011).
Otros poemas de Pilar Fraile Amador y artículos sobre su obra
Pincha para ver la lista de poemas incluidos en el blog
Pincha para ver la lista de poemas incluidos en el blog
El poema es hermoso, profundo, lleno de musicalidad.
ResponderEliminarGracias por el dato.
Un abrazo
El poemario es muy breve, pero un ajoyita. si tienes ocasión cómpralo, te lo recomiendo. Si no te lo llevan a la librería, en la editorial, por correo, te lo mandan sin gastos de envío.
ResponderEliminarUn abrazo.