y dibujaba equis en la espalda de las parejas:
pero ellos y ellas se alejaban
cogidos de la mano
y no se enteraban de nada.
Era invierno. Noche temprana.
No se podía ver su rostro.
Iba y venía como un cuervo,
como movida por el viento,
envuelta en mil harapos, furtiva.
Un niño debió de darle la tiza.
Lo buscamos entre la multitud
esperando encontrar
a un chico pálido, muy serio,
con un trozo de pizarra negra en el bolsillo.
Charles Simic en Desmontando el silencio (Ayuntamiento de Lucena, Córdoba, 2003, ed. de Jordi Doce).
Otros poemas de Charles Simic
Pincha para ver la lista de poemas incluidos en el blog
No hay forma de encontrar ese libro. Y mira que he buscado por todas partes.
ResponderEliminarBuen domingo,
Raquel
Tienes que ir a alguna librería de las que yo llamo "de librero", para que te soliciten el libro. La distribución, parece ser, la hace una biblioteca del Ayuntamiento de Lucena. A mí me lo consiguieron así, en una librería que conozco cerca de casa que me consigue cualquier libro que le pido.
ResponderEliminarLo encuentras seguro en Tres Rosas Amarillas, de Madrid. En la web tienes la dirección y el teléfono, te lo pueden enviar por correo también.
ResponderEliminarhttp://www.tresrosasamarillas.com
¿Sí?, ¿a pesar de que su especialidad es el cuento y relato? Fantástico, que eficacia. Gracias Mariana por aportar esta información.
ResponderEliminar