I have a cat in mind.
T. S. Eliot
Es cierto que abandonó una noche su lugar de acomodo
a mis pies de la cama, cuando yo estaba hecha a su calor
y sin duda ella al mío después de casi veinte años
-¿dura tanto una vida?- de convivencia, amor y entendimiento.
Sin duda quiso ahorrarme el horror del final. Y se fue. Sencillamente
se fue, felinamente, sin que yo alcanzase a adivinar adónde.
María Victoria Atencia en En voz alta. Las poetas de las generaciones de los 50 y los 70. Antología (Ediciones Hiperión, Madrid, 2007, ed. de Sharon Keefe Ugalde).
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Me gusta el ritmo de este poema, como de cuento, como de estar acariciando un pasado que no volverá, pero que nos abriga.
ResponderEliminar"El horror del final" ojalá todos encontraramos a alguien que fuera capaz de ahorrarnoslo.
Bello poema.
Besos.
Esta mujer es todo un descubrimiento, te la recomiendo vivamente. Yo estoy buscando ya cosas suyas.
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