Habrá un día sin fin
y un diálogo eterno
y saldrán lentamente
esas palabras hondas
que hoy se quedan dormidas
porque nada, ni nadie, sabrían contestarlas.
Diálogo sin voz...
frente a frente contigo,
en Ti, dentro del Todo
absoluto y perenne.
En la entraña del Verbo
sobrarán los sonidos.
¡Qué decir indecible
entre labios sellados!
El vacío de hoy
se colmará de cielo
y arderá para siempre
este fuego que callo;
esta palabra honda
que me pesa tan dentro
porque nadie sabría ahora contestarla.
Ernestina de Champourcin en Cartas cerradas (1968) (Centro Cultural de la Generación del 27, Málaga, 1997).
Otros poemas de Ernestina de Champourcin y artículos sobre su obra
Pincha para ver la lista de poemas incluidos en el blog
Toca aquí para ir al Catálogo de poemas
Maravilloso poema. Ya tengo ganas de que ese día llegue.
ResponderEliminarBesos.
Bueno, no sé yo, eh! Besos.
ResponderEliminar