o atarse los pies
a la gracia sensible de una cosa.
Paladear el sorbete colmado
de la mañana.
Avenida extática y no obstante
dinámica—lanzándose toda
con ansiedad
hacia una perspectiva
rubricada en azul.
Cliché recién revelado,
chorreando aún de hiposulfito,
visto a contraluz.
Avenida jocunda
que ha creado esta noche la ciudad
para mí.
Clara fresca, casi aterida
como un chorro de agua.
Lucía Sánchez Saornil en Manantial (n.º 7, 1929), incluido en Poesía soy yo. Poetas en español del siglo XX (1886-1960) (Visor Libros, Madrid, 2016, ed. de Raquel Lanseros y Ana Merino).
Otros poemas de Lucía Sánchez Saornil
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tomo la palabra: