siempre, sin jamás partirte,
y cuando decidas irte,
llévame, Señor, contigo;
porque el pensar que te irás
me causa un terrible miedo
de si yo sin ti me quedo,
de si tú sin mí te vas.
Llévame en tu compañía,
donde tu vayas, Jesús,
porque bien sé que eres tú
la vida del alma mía;
si tú vida no me das,
yo sé que vivir no puedo
ni si yo sin ti me quedo,
ni si tú sin mí te vas.
Por eso, más que a la muerte,
temo, Señor, tu partida
y quiero perder la vida
mil veces más que perderte,
pues la inmortal que tú das
sé que alcanzarla no puedo
cuando yo sin ti me quedo,
cuando tú sin mí te vas.
Fray Damián de Vegas, incluido en Himnos de la Liturgia de las horas (Coeditores litúrgicos, Barcelona, 1988), incluido a su vez en Al celebrar tu memoria. Poesía para domingos y fiestas (Editorial Sal Terrae, Santander, 2005, ed. de Casiano Floristán).
Este fraile estaba enamorado de Jesús-Dios y Hombre verdadero-Era feliz porque el que ama tan intensamente y lo declara tiene que serlo.¡Que suerte haber encontrado a JESÚS, haberlo tratado y amarlo!Yo lo intento y pese a tantas miserias como me circundan y padezco, trato de no alejarme de JESÚS y de que Él no parta sin mi.
ResponderEliminarHay quienes lo citan como himno de santa Teresa de Avila
ResponderEliminarSi, por el estilo, pero está atribuido generalmente a Damián de Vega.
EliminarPrecioso. Es un himno en el breviario, pero no me acuerdo para que dia. 🙏
ResponderEliminarEn el libro del que lo saqué venía.
EliminarHola, si mal no recuerdo es Tomo III Tiempo ordinario en Laudes, y puede ser de la I semana (Martes o miércoles) o de la III semana (lunes, martes o miércoles)
EliminarMagnífica aportación, muchas gracias y un abrazo 🤗
EliminarQue alegría conocer al autor de este himno. Me encanta y no sabía de quien era
ResponderEliminarParece que la autoría está bastante confirmada, aún así hay quien tiene dudas.
EliminarEs increíble esta poesía
ResponderEliminarEs de las más visitadas del blog. Un saludo.
EliminarHermoso himno
ResponderEliminarUn clásico que sigue leyendo mucha gente.
EliminarMi esposo la rezó después de la comunión todos los días, unos meses antes de morir. Yo lo acompañaba. Pero sólo después de un tiempo comprendí el profundo sentido que tenía para él en su preparación para el encuentro con Jesús.
ResponderEliminarQue experiencia tan conmovedora, gracias por compartirla, un abrazo.
EliminarEs el himno más hermoso que he leído, gracias a Fray Damián por tan bellas palabras de amor a Dios.
ResponderEliminarTal vez sea por eso que se ha convertido en el poema más leído del blog.
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