Lámparas agotadas
enfermedades pintadas sobre un abanico
las uñas se adhieren a los frascos vacíos
pintura de navíos cubiertos de conchillas
lámparas agotadas
la luz se calla
en el escenario desierto y mudo de un teatro estupefacto
un pájaro tiembla de fiebre
y sus plumas caen como los dientes de un árbol
búhos acostados en lechos de delirio
ya no hay fósforo ni azufre
ni petróleo ni carbón
la nieve al derretirse da un agua negra
avenidas definitivamente secretas
lámparas frías lámparas agotadas
lámparas agotadas
Jacques Prévert en L'instant fatal (1948), incluido en Antología de la poesía surrealista de lengua francesa (Fabril Editora, Buenos Aires, 1961, selec. de Aldo Pellegrini).
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Un poema agotado
ResponderEliminarSi, jajajaja, el surrealismo pude dejar exhausto. Un abrazo.
Eliminar16/12/24 .hs 20,32 pm
ResponderEliminarComo un espectador , nada quiere interrumpir
de ese concierto bullicioso de cotorras y variadas
aves cantoras , cumplen su oratoria antes de dormir...
Busco la palabra, escarbando en el cenáculo
de ese otro mundo , el humano ...(?)
debo tener el cuidado, respetuoso , al pasado
porque del presente , no comparto "lo agotado"
la chusma pronto, ruge, se returce en una
incomoda postura ,esta como todo lo inerte
pues no entiende y esa es la diferencia
y arroja la piedra, sin culpa, presume
hoy , es molesta...mañana inexistente en la penumbra...
(Critica postuma, no acusa; tampoco defiende)
El Autor a los Poetas , que no se premian
Ramón Santos Peñalva - El Teyú
No se agota la poesía, Un abrazo.
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